martes, 28 de octubre de 2014

MEDIA MARATÓN INTERNACIONAL "VILLA DEL TRATADO" (TORDESILLAS)


Última carrera de un mes de Octubre completito y el test final de cara a la Maratón del día 16. Precisamente el Maratón de los Montes Torozos adelantó su celebración al mes de Noviembre para realizarse tres semanas después de esta media maratón, sirviendo así como cita casi ineludible para todos los atletas que fueran a participar en él. Y eso es justo lo que hemos hecho mi hermano y yo.

Esta carrera siempre ha tenido atletas de gran nivel, y presenta un recorrido homologado por la RFEA y la IAAF.

Después de los buenos resultados de las últimas carreras, mi objetivo no podía ser otro que intentar atacar mi MMP de 1:31:57 hecha en Getafe. Sabía que iba a ser difícil, porque en esa carrera fui al límite y además presentaba un circuito mucho más favorable, pero desde luego lo iba a intentar.
Mi hermano, después de su abandono en Valladolid, buscaba bajar la barrera del 1:35, para triturar su MMP y coger confianza.
Así, cada uno con sus metas, pusimos rumbo a Tordesillas, donde habíamos quedado con mi amigo Alejandro.

Llegamos con tiempo de sobra para recoger el dorsal y la bolsa del corredor (un poco escasa, pero con una bonita camiseta) e ir al baño sin prisas.



Minutos antes de empezar, nos colocamos en una posición bastante delantera, por lo que el tiempo perdido en cruzar el arco iba a ser mínimo.

Con todo el mundo listo, se daba la salida a la que hacía mi media maratón número 5.



Los primeros metros de la carrera se adentraban en el casco antiguo de la localidad, por lo que el trazado era estrecho y con un firme irregular. Sin embargo, no tuve mayores problemas en ir cogiendo mi lugar en la carrera, y en menos de un kilómetro se iniciaba una larga recta por una carretera, por lo que las estrecheces habían terminado.

Este tramo de carretera se hacía bastante pesado, ya que consistía en ir recto casi dos kilómetros, girar en unos conos, y volver por donde se había ido. La ida picaba ligeramente hacia arriba, y el calor era considerable, lo que añadió dureza a la carrera.

Tras este tramo, se iniciaba otro de las mismas características: carretera arriba más de un kilómetro, giro, y vuelta por el mismo sitio.
Yo pensaba en la segunda vuelta, y en lo largo que podía hacerse tanta carretera con más fatiga en las piernas.

Después de terminar con la segunda carretera, la carrera volvía al núcleo urbano, donde una buena subida nos introduciría de nuevo en el pueblo tras cruzar el río Duero. Era una rampa con bastante animación y, sin duda, el tramo más bonito de la carrera, aunque también el más duro.



Al ser la primera vuelta, tengo las fuerzas intactas, y supero ese tramo sin mayores dificultades, pero me digo a mí mismo que en la segunda vuelta tiene toda la pinta de que me va a tocar sufrir en esta parte...

La carrera nos lleva callejeando por las calles de la localidad, donde hay un buen número de gente animando, lo cual se agradece.
En el avituallamiento que estaba justo antes del paso por meta decido beber un poco y afrontar la segunda vuelta.

Paso los 10km en 43:18, en tiempo de MMP, y eso me anima para seguir adelante con confianza.





Tras relajarme un poco en los únicos metros favorables del circuito, comienza el primero de los dos tramos de carretera. El calor ya es bastante elevado, superando los 20º, y al ir por una carretera hace que la sensación sea aún mayor.

Este tramo y el siguiente se me hacen interminables. Son muchos metros en los que parece que no avanzas, y sólo el decirme a mí mismo que puedo bajar mi marca me anima a seguir esforzándome.



Por fin se acaba la carretera, pero llega la subida que me meterá de nuevo en Tordesillas.
Me motivo pensando en que al acabar esa rampa la carrera ya está hecha, pero aun así me noto que no subo como antes y que las piernas me pesan.

Ya sólo queda callejear durante tres kilómetros y todo habrá terminado. Quiero batir mi marca, y lucho por no dejarme ir y seguir apretando. Me cuesta ampliar la zancada y voy bastante justo.
Aun así, sigo superando corredores y, tras una recta que se me hace eterna, enfilo el último giro hacia la recta de meta, donde al mirar el reloj veo que sólo puedo aspirar a bajar de 1:33, y aprieto los dientes para conseguirlo.

Al final, cruzo la meta en un tiempo de 1:32:56. Segunda mejor marca y mejor tiempo oficial (en Getafe hice 1:33:23 en línea de meta).
Al principio sentí rabia; tanto esfuerzo para nada. Pero luego en frío me he dado cuenta que es un gran tiempo para mí, ya que hay que tener en cuenta que el recorrido era exigente y el calor aumentó el nivel de exigencia de la prueba.

Creo que mi margen en esta distancia se mueve entre el 1:32 - 1:33, así que todo lo que sea andar por esos registros lo doy por bueno.

Mi hermano consiguió su objetivo haciendo un excelente tiempo de 1:34:54. Me alegro mucho por él!!



Ahora el plato fuerte. A sufrir y a disfrutar por partes iguales. Una vez más trataré de seguir los pasos de Filípides.

lunes, 20 de octubre de 2014

MEMORIAL VIDAL-MATARRANZ

Primer diez mil después del parón veraniego. Había muchas dudas sobre el tiempo que podría hacer en esta carrera. Me veía bastante bien, los entrenamientos y las carreras de este mes están siendo muy buenos, pero no sabía cómo me iba a comportar a ritmos cercanos a 4min/km.

Tenía muchas ganas de correr esta carrera. El año pasado no la disputé, y esta vez tenía claro que tocaba si o si.

Este memorial es en honor a dos bomberos que perdieron la vida en 1996 en el incendio de una discoteca. Desde entonces, se homenajea cada año a todos los bomberos fallecidos en acto de servicio.

La salida y la meta están instaladas en el parque de bomberos de la ciudad. 
El recorrido es bastante propicio para hacer marca, ya que, si bien presenta una subida de 1km a mitad del mismo, transcurre por calles amplias, largas rectas y sin giros bruscos.

En la zona de salida 800 atletas, voluntarios, miembros de la organización y público, guardamos un emotivo minuto de silencio marcado por el sonido de las sirenas.

Todo listo para empezar la carrera. Se inicia una cuenta atrás de 10 segundos y a correr.



En los primeros metros cuesta correr con comodidad, debido a la gran cantidad de atletas participantes. Sin embargo, ese problema pronto queda solventado debido a la amplitud de las calles por la que transcurre la prueba.

Yo cojo mi ritmo y decido no tratar de modificarlo por tratar de seguir a nadie. A lo mío.
Así, pasan los primeros kilómetros, en los que me encuentro muy cómodo y voy teniendo muy buenas sensaciones.




Para no obsesionarme, decido no mirar el reloj. No quiero llevarme un "palo" si veo que el tiempo se me está escapando (el objetivo era bajar de 41min, algo que sólo había hecho una vez). 
Sé que la subida está en el km 5 y que se puede hacer larga si se va justo de fuerzas, así que ni un sólo alarde o gasto inútil de fuerzas hasta llegar allí.

No paro de pensar qué tiempo estaré haciendo. ¿Iré bien? ¿Tendré opciones de acercarme a los 40min?...
En el km 5, justo al inicio de la subida, decido por fin mirar el reloj. Mi alegría es enorme al ver que marca 19:31. Voy en tiempo de MMP!!
Esa alegría me da un empujón y afronto el kilómetro de subida con confianza y tranquilidad. Me basta con mantener el ritmo, no tengo que recuperar ningún tiempo perdido.

Como era de esperar, el kilómetro hacia arriba se hace notar y mi margen para ese segundo sub 40min se reduce. Paso el km 6 en 23:53.
Por delante 4km que afronto con la responsabilidad de mantener el ritmo y no tirar por la borda el trabajo hecho anteriormente.

El km 7 (27:45) me indica que sigo fuerte y empiezo a pensar otra vez en la posibilidad de hacer marca personal.

Los metros pasan y cada vez tengo más ganas de llegar y certificar mi segundo sub 40min, algo que no creía a mi alcance a día de hoy y que me hace una enorme ilusión.



Caen los kilómetros 8 y 9, y en los últimos 1000 metros sabré si hago marca personal o no. La cosa iba a estar muy justa.
Este kilómetro se me hace eterno... Qué ganas de llegar!!
Por fin, recta de meta. Larga, y con el reloj al fondo reflejando cómo de forma implacable van cayendo los segundos.
Aprieto los dientes, pero veo que el reloj marca el tiempo de mi MMP y a mí aun me quedan unos metros.
Finalmente, cruzo la línea de meta en un tiempo de 39:46.




Estoy exultante, pero con esa pequeña rabia de haber estado tan cerca de batir marca.
Yo sé que este ha sido mi mejor 10 mil, porque la carrera donde hice mi marca de 39:37 en realidad se quedaba corta. Aun así, he bajado de 40 minutos por segunda vez, y eso es un gran éxito para mí.

En Diciembre trataré de nuevo de correr por debajo de los 40 minutos y de renovar mi marca en la distancia en la Carrera del Turrón; pero ahora le toca el turno al plato fuerte de esta segunda mitad del año: en 7 días la media maratón de Tordesillas (donde saldré buscando acercarme a mi marca) y el 16 de Noviembre la Maratón de los Montes Torozos. Empiezo a notar ya ese cosquilleo de que algo grande está cerca, y me muero de ganas de afrontar por tercera vez esos míticos 42.195 metros.

lunes, 13 de octubre de 2014

MONUMENTRAIL


Los chicos de Intenxity Sport organizaban este I Monumentrail de Segovia por los alrededores de la ciudad, y desde que vi el cartel anunciándola, me entraron unas ganas enormes de correrla.
Son los mismos organizadores de la ya clásica (a pesar de llevar sólo tres ediciones) Monumental que recorre el casco antiguo de Segovia en el mes de Febrero. Viendo el gran trabajo que han hecho con dicha prueba, la buena organización de este trail estaba asegurada.
Además, el recorrido transita por una zona que utilizo bastante en mis tiradas largas dominicales, y me apetecía mucho descubrir nuevos caminos que poder incorporar después en mis entrenamientos.

Este tipo de carreras pedestres o trails con cierta dureza y de distancias entre los 10 y los 20km me encantan. Diría que son mis carreras favoritas.
Está claro que un maratón es incomparable, pero sin duda es en estas carreras donde más disfruto.

El precio de 17 euros me parece un poco caro, pero bueno, no iba a ser todo perfecto...
Inscrito.

Con la semanita de lluvias que llevábamos, había que cruzar los dedos para que las condiciones climáticas no fueran adversas.
El Sábado me acosté con tormenta...
Sin embargo, el Domingo amaneció sin lluvia. Menos mal. Eso sí, soplaba un viento bastante frío y desagradable. Decido abrigarme y protegerme barriga y riñones, que no quería "sorpresas" estomacales durante la carrera.

A las 9:10 salgo hacia la Casa de La Moneda, lugar de la Salida y donde se recogían los dorsales. La carrera comenzaba a las 10, y quería ir sobrado de tiempo.

Poco a poco van llegando atletas, entre los que se encuentra Pedro Luis, una auténtica máquina de ganar carreras en la provincia de Segovia (y en ésta no iba a ser menos).

En total, 150 corredores dispuestos a recorrer los exigentes 17km de este I Monumentrail, con un recorrido rompepiernas y un desnivel positivo de 650m.



La Salida se dará en el patio de la Casa de la Moneda, por lo que será muy estrecha. Decido colocarme delante para poder ir más tranquilo.




Empezamos!!!






Salgo entre los 10 primeros.





Los primeros 800 metros son completamente llanos por la Alameda del Parral, y decido mantener un ritmo elevado de inicio para mantener mi posición antes de la primera subida, la más larga de la carrera.

Esta subida ya la conozco, al menos la primera mitad. Sé que es larga y de pendiente exigente y constante que hay que subir a ritmo. Me encuentro bien de fuerzas y consigo llegar arriba habiendo perdido sólo unas 4 o 5 posiciones desde la salida.

A continuación, afrontamos un pronunciado descenso de casi 2km. Conozco el camino y me tiro a saco en la bajada. Supero a un par de corredores y doy alcance a un tercero, con quién completaré el resto del descenso.
Justo al final, afrontamos un primer punto técnico por una bajada entre rocas en la que había que realizar varios saltos. Superado.





Sigo la estela del corredor al que había dado alcance, pero empiezo a notar que cada vez me cuesta más. El terreno es favorable y aguanto a duras penas.
Volvemos a llegar a la zona de salida y bajamos unas escaleras para seguir el curso del Eresma hacia la Fuencisla. Cruzamos el puente sobre el río y, tras girar a la derecha, llegamos al cruce con la Cuesta de los Hoyos, donde voluntarios y policía cortan el tráfico y señalizan la zona a la perfección.
A parir de ahí, comienza una rampa con una pendiente importante que me destroza. De repente me quedo clavado y avanzo muy despacio, siendo superado por varios corredores y perdiendo a los que me precedían.
La subida acaba en un tramo de escalones de piedra durísimo. La gente de delante anda y ando yo también por primera vez (no sería la única). 
Voy muy tocado, y sólo me ayuda el conocer a la perfección ese tramo y saber que tras los escalones hay unos metros más de subida y luego un tramo de terreno favorable bastante largo donde recuperar.

La carrera nos lleva por un sendero que sigue el curso del arroyo Tejadilla durante algunos kilómetros. Es un sendero muy estrecho y la vegetación es abundante, llegando a incomodar bastante el correr. Es sin duda la parte más bonita de la carrera.

Tras este tramo, nos encontramos con una subida importante que me vuelve a dejar claro que voy muy justo de fuerzas. Arriba está el avituallamiento, donde paro 20" a beber agua. Me pasan 4 corredores más, pero esa ya no es mi guerra. Bastante tengo con llegar a la meta lo mejor que pueda.

Ahora la carrera discurre por sendas más anchas y con mejor firme, con continuos sube-baja que van minando mis ya escasas fuerzas.
Y en un giro, aparece de repente la rampa más dura de la carrera. Una fila de corredores que me preceden suben en fila india como buenamente pueden.
Trago saliva y me llega mi momento. Es imposible correr si no eres Kilian Jornet, y a mí me cuesta hasta subir andando por lo estrecho de la senda (no me cabía ni el pie).

Por fin arriba. Seguimos por sendas anchas y sube-bajas poco a poco acercándonos a Segovia. La meta es en la Plaza Mayor o, lo que es lo mismo, va a tocar subir si o si.
Y vaya si se subía...

Tras pasar por el túnel del cementerio judío, se giraba hacia las escaleras que suben desde el río Clamores hasta lo alto de las murallas (Segovia se encuentra entre los valles del Clamores y el Eresma).
Ya era lo que me faltaba...
Subo a duras penas, pero subo. Por fin en el casco antiguo!!!

Estoy al lado del Alcázar, y sólo queda llegar a la Plaza Mayor. Pero los organizadores se guardaban una guinda para el pastel: un giro a la izquierda me lleva a una calle muy empinada de escaleras que parece no tener fin.
Aprieto los diente y para arriba. Curiosamente aquí sí subo con fuerza, y una vez arriba sólo queda bordear la catedral y entrar en una Plaza Mayor abarrotada de gente. Una auténtica gozada.

Cruzo la meta en un tiempo de 1h32, en el puesto 35. 



Creo que si no hubiera gastado tanto al principio podría haber quedado unos puestos mejor, pero aun así estoy muy satisfecho con mi carrera.
Camiseta, agua, coca-cola y a casa a ducharme.

Carrera maravillosa, muy muy recomendable. Recorrido exigente pero que permite disfrutar, y un paisaje de la ciudad espectacular. De nuevo un 10 rotundo a los chicos de Intenxity Sport por su labor a la hora de organizar una carrera en Segovia. Los voluntarios, el recorrido, las indicaciones... Todo perfecto.

Próxima carrera: el Domingo que viene en el Memorial Vidal Matarranz. A ver que tiempo hago en esos 10km... Mi objetivo es bajar de los 41 minutos. 

lunes, 6 de octubre de 2014

CROSS PARQUE LAS CONTIENDAS


Segunda edición en la que participo en esta carrera, y una de las fijas en mi calendario. Junto con la de Don Bosco, para mí son las dos mejores de Valladolid. 
Este año, a causa de la construcción de una pista de pádel, los organizadores han tenido que modificar el recorrido, dejándolo en un circuito de 5km al que se podían dar una o dos vueltas.

Esta es una carrera diferente a las demás que se celebran en la ciudad. Se desarrolla íntegramente en el Parque de Las Contiendas, un cerro con fuertes desniveles y 17km de pistas y senderos. Es un lugar habitual de entrenamiento que mi hermano y yo conocemos muy bien; para nosotros es como correr en "casa".
Sin duda, es la carrera más exigente de Valladolid, y eso siempre es un plus.

Durante los días previos a la carrera estuvimos tratando de adivinar cual sería el recorrido de la prueba, temblando ante la posibilidad de que a los organizadores se les hubiera ocurrido introducir en él la rampa más dura del parque, y por tanto tener que afrontarla en dos ocasiones. Sudores fríos...

La idea era salir juntos sin forzar y luego ir viendo cómo se iba desarrollando la carrera.
En los prolegómenos, empezamos a ver algunos de los rostros habituales en el atletismo popular pucelano.
Al acudir a retirar el dorsal, de nuevo la maldita manía de entregar la camiseta de la carrera. Odio eso, de verdad. ¿Qué se supone que haces con ella? Yo ya suelo venir vestido de casa. ¿Tanto cuesta entregarla al cruzar la meta? En fin...
Así que nada, camiseta encima y a correr bien calentitos.

Unos 500 corredores entre las dos distancias hacían de la estrecha salida un embudo en el que se iba a tardar un rato en poder correr.

Empezamos!!

Y para ir calentando, lo más duro para el principio.
La carrera comienza con un sendero en forma de serpiente que pica continuamente hacia arriba, hasta llegar a la rampa más dura de la carrera: unos 300 metros muy muy exigentes, sobre todo en su parte inicial.




En este tramo inicial, decidimos no gastar fuerzas que luego se pueden echar de menos en empezar a adelantar corredores, con los consiguientes cambios de ritmo y tirones. Tranquilitos hasta la rampa más dura, donde poco a poco se iría despejando el panorama.






Al llegar a la rampa, mi hermano pone un ritmo de subida importante y empezamos a dejar corredores. Al llegar arriba estoy tocadillo, y me esfuerzo por recuperar mi ritmo de respiración normal. Mi hermano me iba hablando y yo que no podía ni responder, jajaja.

Una vez en lo alto del cerro, comienza un tramo con continuos sube-baja, con algunos repechos que iban castigando las piernas. Empiezo a encontrarme bien, y paso a tirar yo de la pareja. Sin tener intención de ello, poco a poco me despego de mi hermano, y ya decido tirar para adelante.

El recorrido nos conduce a una senda de fuerte bajada que bordea el parque por su parte más cercana a la ciudad. Este tramo es de sobra conocido para mí. Sé que es una bajada bastante pronunciada y larga, en la que si se tira con todo se recupera mucho tiempo (yo el año pasado lo perdí...). Voy muy bien y comienzo a bajar sin guardarme nada. Empiezo a superar a bastantes corredores, y voy dando alcance a algunos de mis "rivales" habituales en las carreras vallisoletanas que habían salido muy por delante.

Tras esta larga bajada, la senda se desvía a la derecha y se inicia un tramo continuado de subida que puede hacerse largo si se va justito. Yo me encuentro muy fuerte y doy alcance a un grupo de corredores con los que ya me quedaré hasta el final.
Un trato de terreno favorable y fin de la primera vuelta, la cual completo en torno a los 22 minutos.

De nuevo toca afrontar la parte más dura del circuito. La parte de las "eses", como las llamamos mi hermano y yo me va haciendo bastante "pupa", y cuando me toca enfrentarme a la rampa, esos 300 metros me parecen kilómetros. Voy muy muy justo y tengo que sufrir para llegar hasta arriba sin descolgarme del grupo, que tampoco va muy sobrado.







Una vez superado el mayor obstáculo, llega la parte de los repechos y sube-bajas, que tal y como van las piernas de castigadas, se hace dura. Por suerte voy otra vez recuperando sensaciones y llego a la bajada larga con piernas para ponerme el primero del grupo y abrir un poco de hueco.

En el último tramo de subida nos volvemos a reagrupar varios corredores. Noto que no tengo piernas para un cambio de ritmo y soy superado por varios de ellos. No me importa demasiado; estoy satisfecho de mi carrera, y entro en meta tranquilo en un tiempo de 43:57, en el puesto 55 de la general.

Creo que esta ha sido mi mejor carrera hasta la fecha. Por sensaciones, clasificación, comparación con mis "rivales"... Estoy muy muy contento y he cogido mucha moral para futuras carreras.

El gran objetivo de este otoño-invierno (Maratón Montes Torozos) ya va estando cada vez más cerca, y creo que las cosas van por buen camino.

Próxima parada: el domingo 12 de Octubre en la Monumentrail de Segovia.